Aportes teóricos de Marx y Engels (2008)
La innovación que agregaron Marx y Engels y que los diferenciaron de los Socialistas Utópicos, es que se plantearon la necesidad de una estrategia política, de un sujeto.
Marx (1818-1883), en una Alemania atrasada donde no se había hecho ni siquiera una revolución burguesa -recordemos que Alemania se unifica recién en 1870-, en esa Alemania comienza su vida política como periodista, él quería ser académico, quiso ser profesor y no pudo serlo, estudia derecho porque el papá lo obliga, y estudia filosofía porque a él le dio la gana.
Engels, quien vive en los años 1820-1895, le pesó toda la vida tener un padre burgués, porque la obligación que él tenia era administrar la fábrica, él vivía con una carga, a él le interesaba la literatura, las ciencias naturales, era aficionado a las ciencias naturales y el padre lo puso a administrar la fábrica, primero por mandato familiar, y después, cuando se convierte en un revolucionario, para darle dinero a Marx para que pudiera escribir. Engels se sacrificó toda su vida.
La noche en que Marx termina El Capital, esa noche le escribe una carta a Engels reconociéndole que si no hubiera sido con su ayuda, él nunca hubiera podido escribir El Capital.
Marx comienza como un periodista y la primera vez que se toca con la propiedad privada es cuando hacia periodismo sobre el parlamento alemán, era un periodista parlamentario y había un debate en el parlamento en la zona dónde él vivía, en una revista llamada la Gaceta del Rin y había un debate sobre el robo de leña. Los campesinos robaban leña para hacer fuego en el invierno y eso produjo un gran debate sobre la propiedad privada del campo. Esta es la primera vez que él ve, que toma conciencia, del papel que juega la propiedad privada en la sociedad actual. El mismo Marx cuenta qué impacto tuvo en su conciencia descubrir el papel de la propiedad privada y se dio cuenta, que en la sociedad capitalista la propiedad privada era algo fundamental, no era una cuestión secundaria.
Sus amigos filósofos creían que todo el problema era que había un discurso viejo en Alemania y había que remplazarlo por un discurso nuevo, que había una iglesia reaccionaria y que había que remplazarla por una iglesia más moderna. Con el robo de leña de esos campesinos es la primera vez que advierte que no era una cuestión de discurso ni de religión, sino que era una cuestión material, no material en el sentido químico o físico, era una cuestión material en el sentido social y a partir de allí se involucra, se va radicalizando y se tiene que ir de Alemania, recordemos que Alemania era muy reaccionaria.
Primero va a Bruselas y después va a Paris y luego a Inglaterra, donde muere después de vivir 33 años exiliado. El Capital lo escribe en Inglaterra.
Cuando Marx pasa por Francia se topa con un segundo impacto en la conciencia: los trabajadores. En la Alemania atrasada donde él vivía, no habían sindicatos, no habían grupos políticos de obreros, por eso los debates que tenía de joven eran debates muy abstractos, hablaban de la libertad, cómo cambiar la sociedad, pero todo muy genérico, no salía del micro clima universitario.
En Francia, cuando se tiene que ir exiliado en el año 1844, toma contacto con esos primeros grupos de obreros que eran Socialistas Utópicos. Fue la primera vez que este hombre vio obreros de carne y hueso, dejó de debatir con profesores y comenzó a debatir con los trabajadores. En su concepción esto fue muy importante porque él siempre estuvo girando dentro de la orbita filosófica y es la primera vez que sale de la filosofía en busca de lo que no tenían los Socialista Utópicos, que era el sujeto, es decir, quien va a llevar a la práctica esas ideas buenísimas.
Marx encuentra al sujeto en Francia, en el trayecto de su obra intelectual, este período es muy importante, en esa fecha escribe los famosos Manuscritos Económicos Filosóficos , que fueron publicados por primera vez en 1942 en la URSS y en Alemania.
Manuscritos Económicos Filosóficos de 1844
En esa obra, Marx utiliza una categoría fundamental del capitalismo que es la enajenación o alineación , él dice: “los trabajadores aunque se les aumente el salario muchísimo van a seguir siendo esclavos porque hay un proceso social dentro del capitalismo, dentro del mercado capitalista que no se soluciona con el aumento del salario” , es decir, un obrero aunque tenga un carro muy bueno, un equipo de sonido muy bueno, etc., si continúa en el engranaje capitalista, está prisionero de la enajenación o alienación .
La enajenación o alienación es la pérdida de lo más característico que tenemos los seres humanos y que no lo tiene un gato, un perro, una paloma, un delfín, dice él, “ es la capacidad de crear, la capacidad de hacer una actividad humana creativa” , siempre comparaba a los seres humanos con los animales. Esa comparación la tomó de Hegel, filósofo alemán, al cual estudiaron Marx y de Engels, que aportó mucho, aunque era un burgués. Hegel siempre comparó a los animales con los humanos tratando de buscar qué era lo que teníamos de específico en relación a todas las otras especies que existen.
Marx estuvo muy preocupado toda su vida como pensador sobre qué nos define como seres humanos, qué nos define como sujetos, y es en 1844 cuando plantea que: “ lo que nos define como seres humanos es la capacidad de trabajar creativamente, la capacidad de transformar la naturaleza y adaptarla al mundo humano y al mundo cultural ”.
¿En el capitalismo los seres humanos pueden ejercer libremente esa capacidad humana?
La tesis de Marx es que no, porque entre los seres humanos y la naturaleza, en una sociedad capitalista, se encuentra el mercado y, aunque hayan muy buenas intenciones, los seres humanos pierden lo más propio que tienen: la capacidad de crear .
En el capitalismo, son las mercancías las que ocupan el lugar central, no el sujeto. En el capitalismo el dinero manda, el que tiene dinero hace lo que quiere y el que no tiene dinero no. El dinero vale mucho más que las personas.
La tesis de Marx es que en el mercado capitalista el lugar central no lo ocupan los seres humanos, las personas, sino las cosas. Este proceso se define así: las cosas y las personas ocupan los lugares opuestos, las personas se vuelven cosas y las cosas se vuelven personas. Por ejemplo, un obrero se muere en una empresa y es contabilizado como una cosa, como si fueran tres bolsas de cemento, es decir, un objeto más que hay que pagar. Otro ejemplo de cosas convertidas en sujetos es el oro. Los lingotes de oro en un banco son pedazos de cosas, pero en la sociedad capitalista son sujetos, ya vemos en los noticieros que el periodista dice: “hoy el mercado estuvo tranquilo, hoy el mercado estuvo nervioso, hoy el mercado estuvo triste” . ¿¡Cómo!, las acciones están tristes? ¿Tienen acaso problemas de pareja las acciones?
Marx lo adopta de otros pensadores anteriores, algunos son famosos como el inglés Shakespeare, quien en sus obras de teatro exponía el papel del dinero y decía que era mágico porque un viejo con dinero se transforma en un joven atractivo, alguien débil si tiene dinero se transforma en un tipo fuerte, como que el dinero trastoca todo, cambia las características de las cosas.
En los Manuscritos Marx cita largos párrafos de la obra El Timón de Atenas donde Shakespeare, que no era socialista, ni comunista, solo un escritor de obras, ya había advertido que el dinero y el oro tenían una característica rara, era una cosa que se convertía en persona y que convertía a las personas en cosas.
Después cita a otro autor alemán que también escribió obras de teatro y que tampoco era socialista, era un burgués que se llamaba Goethe que escribió una obra de teatro llamada Fausto , que expone un pacto entre el hombre y el diablo, y también ve en el dinero una cualidad mágica, fantástica que hace invertir todo al revés, lo negro se vuelve blanco, lo blanco se vuelve negro, el viejo se vuelve joven, etc. El dinero da vuelta a todo. De allí Marx dice que si ellos lo vieron en el teatro y otros autores lo vieron en la economía, hay algo raro en el dinero .
Por eso el Che Guevara en los debates de cómo funciona una empresa en el Socialismo, y en una carta famosa que recomiendo leer que se llama El Socialismo y el Hombre en Cuba , es quizás el texto más famoso del Che escrito en 1965, es una carta que le escribe a un compañero de Uruguay y le dice : la derecha nos acusa de que para nosotros los socialistas y comunistas el Estado es todo, la persona no es nada, la derecha dice que defiende al individuo, los comunistas aplastamos la libertad individual, en realidad lo que nosotros pensamos es esto … y le escribe esa carta que es el gran documento teórico del Che Guevara, gran aporte a nivel mundial, en esa carta es fundamental la categoría de enajenación y dice que: el objetivo de la Revolución Socialista es ver al ser humano libre de la enajenación , ver al ser humano liberado de ese proceso “raro” mediante el cual las personas se convierten en cosas y las cosas se convierten en personas, los objetos son sujetos y los sujetos son objetos, este es el gran objetivo de la Revolución Socialista.
Dice el Che que el Socialismo no es solamente un proyecto económico, al mismo tiempo es un proyecto que apunta a eliminar la enajenación y la única condición para superarla es eliminar el mercado, no puede haber Socialismo si hay mercado, son incompatibles porque mercado es igual a enajenación. Si existe el mercado, por más que seamos los mejores socialistas del planeta hay enajenación y el Socialismo es la antitesis del mercado.
¿Cuál es la herramienta con la cual deberíamos luchar contra el mercado?
El Che Guevara dice: L a Planificación . Ahí viene el debate ¿mercado o planificación en la transición socialista? No es un debate solamente económico, el Che Guevara tiene un estudio muy riguroso de los Manuscritos de Marx, donde el mercado es igual a dinero, a enajenación. El plan no solo es una tesis económica, es un proyecto que va mucho mas allá de la economía, por eso a veces a los economistas les cuesta entender esto.
Marx escribió muchas versiones de ese gran proyecto que es El Capital. Él dice que empezó siendo un periodista, no era comunista, no era socialista, era liberal, era un periodista, quería cambiar la sociedad y pensó que lo haría desde la prensa, después comprendió que de la libertad de prensa tenía que pasar a una crítica de la religión, porque en la Alemania que le toco vivir, la iglesia protestante que no sigue la línea de Tomas Munzer, el cristianismo de la liberación, sino la de Martín Lutero que es burguesa y conservadora, estaba orientada hacia la apología del capitalismo.
Para el protestantismo clásico acumular es fundamental. Hay un libro de un burgués protestante, no socialista Max Weber que se llama La Ética Protestante y los Orígenes del Capitalismo . En los orígenes del capitalismo en Europa, el protestantismo, defendía esa necesidad de acumular, ayudó a que surgiera el capitalismo.
Marx dice: “ como vi que la iglesia de mi país era tan conservadora y aplaudía el acumular, después de pasar esa etapa de periodista ingenuo liberal, pasé a la crítica de la iglesia, pero rápidamente me di cuanta que para cambiar la sociedad criticar a la iglesia era tan limitado, que no iba cambiar Alemania porque yo criticaba a la iglesia. Entonces descubrí que la verdadera crítica no estaba en la religión, la verdadera tarea era hacer una crítica política, había que criticar a las instituciones políticas”.
Empieza entonces a escribir sobre el Estado, pero rápidamente se da cuenta que toda la vida política, institucional, parlamentaria, con los partidos políticos, etc. tenía por detrás al mercado, es decir, que detrás de los bellos discursos políticos había intereses económicos. Por lo tanto, a la conclusión a la que él llega es que para cambiar la sociedad hay que estudiar la ciencia social que estudia el mercado capitalista: La Economía Política . Por eso Marx le dedicó alrededor de treinta años, a pesar de que era abogado y filosofo, a estudiar economía. Por eso escribió miles de páginas criticando la economía política, porque era la ciencia que legitimaba, que defiende al mercado capitalista.
La gran obra de Marx
La gran obra a la que llegó es El Capital , cuyo subtitulo es: Crítica de la Economía Política.
Las dos corrientes de la Economía Política
Una era la economía vulgar , representada por los que hoy diríamos el Banco Mundial, el FMI, la escuela de Chicago, es decir, los que no les interesa para nada la ciencia y solamente quieren defender a los empresarios y a los banqueros, por lo tanto, Marx los desprecia.
En cambio, dice Marx, hay otros economistas que no son simplemente defensores de los empresarios, sino son gente seria, rigurosa, que de verdad quieren entender cómo funciona la sociedad, pero tienen el defecto de ser burgueses. A estos economistas Marx los llama economistas clásicos o científicos .
¿Cuál es la diferencia?
Los primeros sólo quieren defender a los empresarios y mienten, dicen cualquier tontería. Los segundos aportan algo, pero tienen un límite, son burgueses. Por esa condición, no pueden aceptar que la fuente de la ganancia empresarial es la explotación de los trabajadores. Marx respeta a los clásicos, desprecia a los vulgares y critica a ambos.
El Capital es una gran obra que tiene varias teorías: La teoría del poder, de la dominación, de la explotación, del funcionamiento del mercado: La ley del valor, del plusvalor etc. La teoría central es la del mercado capitalista, donde Marx plantea que la fuente de la ganancia empresarial es la explotación de la fuerza de trabajo.
Empieza distinguiendo dos categorías que en nuestro lenguaje siempre se usa como sinónimo: trabajo y capacidad de trabajar. ¿Cuál es la diferencia?
Marx dice: “ el trabajo es la actividad que realiza la gente y, la capacidad de trabajar es la fuerza de trabajo”.
Por ejemplo, si yo trabajo en la Shell ¿qué me paga la Shell ? Me paga por mi capacidad de trabajar un salario. ¿Cuánto produce la capacidad de trabajar? 15X, esto es lo que me paga, ese es el valor de mi fuerza de trabajo. Pero, ¿cuánto trabajo real ejecuto? Ejecuto 20X, entonces el empresario me dice: ¡lo sé, yo te pago por lo que vos trabajás!
La economía política lo toma como un hecho, sin cuestionar, que el empresario capitalista clásico me paga por todo el trabajo que hago. Marx dice: “¡ No! Me pagan por lo que vale mi capacidad de trabajar, que siempre es menor al trabajo que yo ejecuto.” Por ejemplo, todo el trabajo lo realizo en 10 horas, produzco 20X pero a mi me pagan 15X que sería el equivalente al valor de mi capacidad de trabajar. ¿Cómo mido ese valor? Sería equivalente al valor de todas las mercancías necesarias para que al día siguiente yo pueda volver a trabajar (comida, vestimenta, vivienda, educación). Ese valor que se mide socialmente es de 15X, en mi jornada laboral yo lo hago durante siete horas y media, pero mi jornada laboral es más larga, yo trabajo diez horas, entonces el patrón (suponiendo que el empresario honesto, ético, que cumple con toda la ley, en el capitalismo eso nunca pasa) a mi me paga por mi capacidad de trabajar.
Esta distinción que se hace del capitalismo, en América Latina está muy presente. Se dice que habría un capitalismo bueno, nacional humano, tercera vía, el capitalismo andino, social, sueco, dialoguista, racional etc., y otro malo que seria el neoliberalismo salvaje, mercado salvaje, etc.
Para Marx esta oposición es absurda, el dice “ aun en el caso de que eliminemos el capitalismo malo y nos quedemos con un capitalismo que supuestamente cumple las reglas, que respeta las leyes y que paga en la fecha que hay que pagar, igual nos están pagando por nuestra capacidad de trabajar pero no por todo el trabajo realizado”. La diferencia entre el valor de todo el trabajo realizado y el valor de mi fuerza de trabajo se llama Plusvalía.
¿ La Plusvalía se la queda el empresario de la Shell que a mi me contrata? Marx dice: ¡No!. En la sociedad capitalista real, la plusvalía es como el botín de un pirata y, como todo pirata, tiene que dividir el botín porque hubo otros piratas que lo ayudaron a robarlo. Una parte se lo llevan los empresarios, lo que Marx va a llamar ganancia industrial , otra parte se la llevan los bancos: interés bancario , otra parte se lo lleva el capital agrario : renta terrateniente , otra parte la paga al Estado a través de impuestos .
La conclusión política de Marx
Los trabajadores, la fuerza de trabajo, mantienen al conjunto de la sociedad, de ellos salen todas esas fuentes de ingresos supuestamente mágicas. La más mágica de todas es el interés que parece ser hecha por un alquimista, por un mago. Llevo al banco hoy un billete de 100 y al mes siguiente tengo 110. ¿Creció sola la plata como una plantita? En la imagen popular creció sola la plata y en la economía política sobre todo la vulgar dice: sí, crece sola . El dinero genera interés, la tierra genera renta, el capital genera ganancias. Marx dice esas tres ilusiones mágicas expresan fetichismo. Esto de creer que un billete verde en un banco genera interés sólo, sin que en el medio haya trabajo humano, es el fetichismo elevado a la máxima potencia.
La conclusión de Marx en 1844 era que la categoría central era la alineación. En 1865 era el Fetichismo, la plusvalía, es decir, la explotación.
¿Qué es el fetichismo?
El fetichismo es otorgarle a un objeto una capacidad humana, expresa con una palabra distinta, eso que en su juventud, Marx llamó alienación, y tiene otras características distintas a la alineación que podemos discutir en otro momento.
Para el Che Guevara tanto los Manuscritos del 44 como El Capital son fundamentales, porque la conclusión entonces sería que para cambiar la sociedad no alcanza con repartir lo que hay, es decir, socializar el consumo, eso que quería Juan Crisóstomo padre de la iglesia. Socializar los bienes de consumo, que la gente tenga un salario alto, se vista mejor, coma mejor, etc. ¡No alcanza!. Esta es la gran conclusión política.
¿Qué propone Marx?
Marx dice: “lo que hay que cambiar no es la manera de distribuir sino la manera de producir, es decir, el Modo de Producción”.
Si solamente cambiamos la manera de distribuir pero mantenemos el modo de producción capitalista, seguimos en el capitalismo. En necesario revolucionar el modo de producción, así cambiará la manera de distribuir. La manera en que se reparte, si se quiere, es un efecto y el modo de producción es la causa, si solamente atacamos los efectos y dejamos intactas las causas, a la larga el capitalismo se recicla.
Por ejemplo, el General Perón que no era un neoliberal, era un keynesiano, era partidario de que el Estado intervenga, etc. El General Perón tiene un discurso famoso en la bolsa de comercio en la segunda mitad de la década del 40 donde le dice a los empresarios argentinos: “yo no soy socialista, ni soy comunista, pero les advierto que si ustedes no reparten el 30 por ciento, el pueblo se va a tomar el 100 por ciento”
keynes, economista inglés que después de la crisis de 1929 le dice a los empresarios de occidente: “compañeros repartamos un poquito porque sino se vienen los rojos, miren lo que pasa en Rusia”. keynes no quería el Socialismo, si uno lo compara con los neoliberales, keynes parece un socialista que defendía a los humildes a los trabajadores, pero en realidad él defendía a los empresarios. En conclusión, distribuir mejor la renta es un mecanismo de los empresarios para neutralizar las protestas populares y el gran teórico de eso a nivel económico fue keynes, repito no era socialista, era un crítico del Socialismo.
Entonces la propuesta de Marx no es la de keynes. Como hemos vivido un cuarto de siglo de neoliberalismo en América Latina hay mucha confusión, cualquiera que critique el mercado capitalista ya parece un compañero, un socialista.
En los Foros Sociales se vio mucho esa confusión, mucha gente ha circulado frente al neoliberalismo y todos parecían compañeros. Una vez que el neoliberalismo empieza a desprestigiarse y en América Latina aparecen nuevos procesos, se reabre el debate, el neoliberalismo ya no va más ¿Cuál es la alternativa entonces? La consigna de estos foros es otro mundo es posible y ahí viene el debate ¿Cuál es ese otro mundo? ¿Es distribuir mejor manteniendo el mismo modo de producción o es cambiar el modo de producción?
Distribuir mejor lo que se tiene es un capitalismo reformista. La socialdemocracia obviamente se juega con eso, en el mejor de los casos. Por ejemplo, yo creo que el partido socialista obrero de España ni siquiera está en esa corriente, porque ni siquiera quiere repartir mejor, simplemente es neoliberal. Pero la socialdemocracia sueca, noruega, sí se puede ubicar en esta corriente.
Si la estrategia es mejorar la distribución de los recursos creyendo que ese es el Socialismo, es muy complicado y allí viene la gran discusión, el gran debate en América Latina: ¿a qué le llamamos Socialismo del Siglo XXI?