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(Continuación, núm. III)
¿Qué entendemos los comunistas por “nación”? El marxismo revolucionario ha definido así la nación: “Una comunidad estable, históricamente constituida, que une la comunidad de idioma, de territorio, de vida económica y de mentalidad psíquica, que se manifiesta en la comunidad de cultura”.
Y esa definición es exacta, lógica, ya que existe una concatenación dialéctica en tales condiciones.
Ahora bien, Lenin decía perfectamente: “En cada nación hay dos naciones”, la nación integrado por los “explotadores” y la nación compuesta por los “explotados”; la Euskadi de los capitalistas (drukitzazaleen Euskadi) y la Euskadi de los proletarios (langilleen Euskadi).
Los comunistas no podemos recurrir a disquisiciones escolásticas para explicar los hechos históricos. Nosotros examinamos los problemas a la luz del materialismo histórico de acuerdo con la interpretación materialista de la historia metodizada por Marx.
Desde el punto de vista comunista, las naciones se constituyen al desarrollarse las relaciones capitalistas, ya que esa comunidad nacional, todos esos signos que constituyen la “nación”, pueden formarse solamente en una época en que as relaciones económicas y sociales, las vías de comunicación, etc., están suficientemente desarrolladas, lo cual es posible con el desarrollo del capitalismo que va destruyendo la división económica del feudalismo.
“Una nación (dice Stalin), no sólo constituye una categoría histórica en general, sino una categoría histórica “de una época determinada”: del capitalismo naciente. El proceso de liquidación del feudalismo y del desarrollo del capitalismo constituye a la par el de la formación de las nacionalidades”.
En el caso de Euskadi, el movimiento nacionalista vasco, la lucha organizada por el derecho a su soberanía política, surgió también en la época capitalista y se inició en Vizcaya, uno de los más importantes centros industriales del imperio español.
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¿No existe contradicción en el hecho de que los comunistas, siendo como son internacionalistas, defiendan a la vez el derecho de Euskadi?.
No, no existe ni puede existir contradicción. Claramente escribía Lenin en 1916: “Exactamente igual que es imposible a la humanidad llegar a la supresión de las clases de otro modo que por la dictadura de la clase oprimida, es también imposible para la misma humanidad llegar a la fusión inevitable de todas las naciones de otro modo que por una etapa transitoria de plena libertad para todos los pueblos oprimidos, es decir, su derecho a la completa separación”.
La gente que no ha profundizado la cuestión, encuentra también “contradictorio” que el comunista de las naciones opresoras (España) defienda la “libertad de separación”, mientras que el comunista de las naciones oprimidas (Euskadi) sostenga la “libertad de unión”. Pero —como decía Lenin— no hay que reflexionar mucho para comprender que no hay ni puede haber en la actualidad otro camino que conduzca el Internacionalismo y a la fusión de las naciones. A través de las fronteras, los artesanos, como los intelectuales, los trabajadores del campo como los de la ciudad, tanto de la nación oprimida como de la opresora, deben darse la mano y luchar a una por el derecho a la soberanía de sus pueblos y por su liberación económica, base de todas las libertades.
Los comunistas luchamos naturalmente, contra la tendencia a la “estrechez nacional”, pues no podemos ni debemos encerrarnos en un movimiento patriótico, “chauvinista”, sino que tenemos que considerar el conjunto del movimiento revolucionario y comprender que hay que subordinar el interés particular (libertad de separación) al interés general (libertad de unión)
(Continuará)
JEIKI
euskadi roja
ORGANO en EUSKADI del PARTIDO COMUNISTA (SE de IC) PORTAVOZ de los SINDICATOS REVOLUCIONARIOS
Año I, San Sebastián, 20 Mayo 1933 nº9
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