Al Partido Comunista no le sorprende la actitud de los dirigentes del P. N. V., al negar su apoyo a la campaña pro-amnistía de clase. Las razones que arguyen dichos señores, parten del principio “cristianísimo” de que amantes de Jesús no pueden desear el que salgan de las prisiones los obreros y campesinos revolucionarios, quedando en la cárcel los verdugos de Sanjurjo y compañía.

En este aspecto es como lo plantean, pero el fondo de la cuestión es otro que lo que ellos alegan.

El P. N. V. enrola en sus filas grandes masas de obreros y campesinos, pequeños comerciantes y empleados que ven en dicho partido el único instrumento de su liberación del yugo del imperialismo español, y como consecuencia adquieran económicamente un mejor bienestar librándoles de las cargas y tributos que les carga el poder central.

Pero en el fondo de las filas del P. N. V. están los banqueros y terratenientes, que especulan con estas grandes masas en provecho de sus intereses de clase, azuzando en el corazón de las mismas un odio hacia el proletariado revolucionario, que viene a entorpecer la “economía del país”, es decir, los intereses particulares de clase de los Chalbaud, Sota, Urquijo y demás buitres ambiciosos.

La razón de que los dirigentes del P. N. V. sean opuestos a la campaña de amnistía de clase que el S. R. I., el P. C. y otras organizaciones revolucionarias están llevando a cabo en toda España, Cataluña, Galicia y Euskadi parte del principio de clase bien definido: ellos quieren la amnistía para Sanjurjo, Martínez Anido y demás generales monárquicos e imperialistas, porque estos asesinos serán la única garantía contrarrevolucionaria a su deseos de aplastamiento de la revolución, a sus deseos de impedir que el movimiento popular nacional de Euskadi se ligue al resto de la revolución española, que favorece más rápidamente los deseos de liberación de las nacionalidades oprimidas por el imperialismo español.

¿Acaso la libertad de los monárquicos fascistas puede favorecer y estimular las ansias populares de Euskadi?  ¿Es que la experiencia histórica de los años de las dictaduras monárquicas no fueron grandes lecciones para los nacionalistas vascos, perseguidos y encarcelados y deportados? ¿Acaso la masa del país no vio cómo sus anhelos populares era escarnecidos por los verdugos monárquicos, a los que hoy piden su libertad los Aguirre, Robles y demás apóstoles del P. N. V.?

Los banqueros del nacionalismo vasco, es justo que utilicen a sus abogados desde la dirección del Partido, pero deber de P. C. en Euskadi es desenmascarar a estos señores que en el fondo aplauden la política contrarrevolucionaria del Gobierno, sus formas de represión brutal contra las masas populares de Euskadi.

El oponerse a la amnistía es algo.

El oponerse a la amnistía de clase es precisamente para evitar que los 9.000 presos revolucionarios que están en los presidios de España, y en las cárceles de Euskadi donde se encuentran docenas y docenas de luchadores vascos, salgan a la calle a engrosar las filas de la revolución que destruya la política de rapiña y bandidaje de la burguesía vasca y española.

¿Qué supone pues la amnistía de clase para la liberación de Euskadi? Supone que los obreros revolucionarios guiados por el P. C. irán al derrumbamiento del engranaje imperialista ligados a las grandes masas vascas, supone que el movimiento popular de Euskadi se fortalecerá y verá a través de la lucha a sus verdaderos enemigos en el interior de sus filas que especulan con un sentimiento ñoño del cristianismo para mejor explotarlos y engañarlos.

Los presos nacionalistas en Bilbao, protestan de que los jefes pidan la amnistía “para todos”, estos camaradas saben tal vez por experiencia o intuición de clase que los verdugos imperialistas Sanjurjo y demás debieran estar fusilados, ya que el poder en sus manos con las leyes votadas y aprobadas por los republicanos, socialistas y monárquicos ahogarán en sangre toda lucha dirigida contra el poder central, sostenedor de los privilegios de los banqueros y terratenientes, españoles y vascos.

Los obreros y campesinos de Euskadi, los pequeños comerciantes y empresas, deben unir sus esfuerzos con el resto del proletariado revolucionario de España, que a la consigna de huelga general de 24 horas se van a lanzar la segunda quincena del corriente mes, para arrancar a los revolucionarios de clase encarcelados en las mazmorras del imperialismo.

¡Obreros nacionalistas y de Solidaridad Vascos! vuestro puesto está en reforzar el movimiento pro-amnistía, ya que con eso fortaleceréis el desarrollo de la revolución en toda la península, a la vez que daréis un firme paso en la consecución de vuestra liberación nacional y social.

El Partido Comunista en Euskadi os invita a que discutáis en vuestras asambleas y reuniones la carta abierta publicada en “Mundo Obrero” del día 3 del corriente, con vistas a la movilización general de 24 horas, organizando comités de fábrica, minas y caseríos que impiden vuestros dirigentes, que sirven solapadamente la política de bandidaje de la plutocracia española

Aurelio ARANAGA

 

 

 

 

euskadi roja

ORGANO en EUSKADI del PARTIDO COMUNISTA (S.E. de I.C.)   PORTAVOZ de los SINDICATOS REVOLUCIONARIOS

Año I, San Sebastián, 12 Agosto 1933  nº 21

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