Hemos hablado con un enviado de Donosita. No se trata del tan ganado tópico con el que la mayor parte de la Prensa encabeza tal o cual noticia más o menos verídica. Esta información que ofrecemos a nuestros lectores está bebida en fuente directa y facilitada por persona de absoluta confianza y garantía, testigo presencial de los hechos que en este reportaje se refieren. ¿Quién es la persona? ¿Dónde está? Ese es el único secreto que nos reservamos. Dejémosle expresarse en su charla.

El aspecto de la ciudad —nos dice— es in apariencia de absoluta normalidad. Los cafés Raga y Madrid, rebosantes de público “distinguido”, son  el centro de reunión de todos los delincuentes facciosos, los cuales hacen un verdadero alarde de ostentación y lujo, que contrasta descaradamente con la miseria y privaciones del pueblo.

Las manifestaciones religiosas, en adelante encabezadas con los desfiles de falangistas y requetés, en el que forman a la romana y con paso alemán hasta niños de cuatro años cedidos a la fuerza por sus padres componen el plato diario degustado con grandes aclamaciones por toda la canalla de vividores y soplones       en los citados cafés. No falta en esa manifestación el repiqueteo de las campanas que queriendo sonar a fiesta, lanzan tétricos sonidos que estremecen a los que allí sufren la tiranía de estos canallas.

 

DONOSTIA INVADIDA POR  LA CANALLA DORADA

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San Sebastián ha sido invadida por gentes procedentes de Navarra y Aragón. Aristócratas de bajos fondos, matones profesionales que no tratan de ocultar en sus actos las lacras de su rebajada moral. Gente desconocida para las personas honradas que todavía vegetan miserablemente en aquella ciudad, desecho de la sociedad traído por los que mangonean el cotarro donostiarra para hacer masa y dar una sensación de normalidad a los extranjeros que por necesidad de sus cargos se trasladan a la misma, normalidad que huye y se esfuma cuando se adentra uno por la parte vieja de la ciudad; por nuestras queridas calles de tan grandes recuerdos, Mayor, Puerto, Fermín Calbeton, de cuánto terror no sois mudos testigos.

 

NO SE PUEDE HABLAR EL EUSKERA

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Se ha prohibido totalmente el hablar nuestra lengua vernácula, el euskera y su habla es sancionado con las más severas penas. Este es, entre otros, un exponente de la falta de libertad y del terror que impera en nuestra querido pueblo.

Nadie puede comentar tal o cual noticia; se vive bajo la tiranía del silencio. Últimamente, seis ancianas de más de setenta y cinco años asiladas en la Casa de Misericordia y que manifestaron cierta simpatía por el Frente Popular, fueron rapadas y maltratadas despiadadamente por los verdugos a sueldo de aquellos cobardes y enviadas a Bayona donde se hallan atendidas debidamente, bajo los efectos aún, de los vejamientos sufridos.

 

TRABAJO “VOLUNTARIO”

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El trabajo es obligatorio, sin que nadie pueda proferir la palabra sueldo, el cual, por otro lado no se satisface a nadie. El que no esté conforme con estos procedimientos, queda eliminado. . .  para siempre.

El pueblo en su intimidad manifiesta su descontento, aunque, influenciado por las noticias de la Prensa fascista, cree que el movimiento está totalmente liquidado a favor de sus tiranos.

 

SIGUE IMPERANDO EL TERROR

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Ha sido fusilada mucha gente. No existe pueblo alguno de la provincia donde no haya sido asesinado algún sacerdote o persona nacionalista de algún relieve. Todo ello dentro de un secreto que es la mayor acusación.

Entre las personas conocidas asesinadas por esa horda de chulos sin moral y sin patria figuran: Álvaro Calvete, Germán Iraza de la villa “Paraíso”, el cual tuvo un comercio de mercería en la calle de Garibay, al lado del fotógrafo Marín, otro faccioso de Ribera. Ángel Balzola, conductor de “taxi” en la parada del Bulevar, persona queridísima y apreciado por toda la parte vieja; Evaristo Sanz, sueño de un taller de niquelado, situado en la plaza de Easo y persona conocida en los medios deportivos. Este último murió en las circunstancias más trágicas: Sacado de su casa a las dos de la madrugada y presintiendo su muerte, se arrojó del coche que le transportaba a Ulla y huyó a campo traviesa sin poder evitar que le alcanzasen algunas balas disparadas por sus perseguidores. Totalmente extenuado pudo llegar a Pasajes, donde fue detenido por la Guardia civil y entregado a sus verdugos quienes lo remataron en Ulla.

 

  

euskadi roja

ORGANO en EUSKADI del PARTIDO COMUNISTA (S.E. de I.C.)   PORTAVOZ de los SINDICATOS REVOLUCIONARIOS

Año II, San Sebastián,21 Noviembre 1936  nº 59

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