Ver el original

 

 

PROLOGO

  

El presente MANUAL DE ECONOMÍA POLÍTICA ha sido redactado por un grupo de economistas formado por el académico K. V. Ostrovitiánov; D. T. Shepílov, miembro correspondiente de la Academia de Ciencias de la U.R.S.S.; L. A. Leóntiev, miembro correspondiente de la misma Academia; I. D. Laptev, miembro de número de la Academia "Lenin" de Ciencias Agrícolas de la U.R.S.S.; el profesor I. I. Kuzmínov; L. M. Gatovski, doctor en Ciencias Económicas; el académico P. F. Yudin; A. I. Pashkov, miembro correspondiente de la Academia de Ciencias de la U.R.S.S., y V. I. Peresleguin, candidato en Ciencias Económicas. En la selección y ordenación de los materiales estadísticos incorporados al MANUAL ha colaborado V. N. Starovski, doctor en Ciencias Económicas.

Muchos economistas soviéticos aportaron, en la fase de elaboración del proyecto de la obra, valiosas observaciones críticas e hicieron útiles sugestiones acerca del texto, que los autores han tenido en cuenta al proceder a su redacción definitiva.

Revistió una importancia inmensa para la composición del MANUAL DE ECONOMÍA POLÍTICA que aquí ve la luz la discusión en torno a los problemas económicos organizada, en noviembre de 1951, por el Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética. En el curso de dicha discusión, en la que tomaron parte activa cientos de economistas soviéticos, fue sometido a un minucioso examen crítico el proyecto del MANUAL presentado por los autores. Las propuestas que al final de esta discusión se hicieron, encaminadas a mejorar el proyecto sometido a examen, contribuyeron en considerable medida a perfeccionar la estructura de la obra y a enriquecer su contenido.

Han tenido a su cargo la redacción definitiva del libro los camaradas K. V. Ostrovitiánov, D. T. Shepilov, L. A. Leóntiev, I. D. Laptev, I. I. Kuzminov y L. M. Gatovski.

Plenamente conscientes de lo que la publicación de un manual marxista de Economía política significa, los autores se proponen seguir trabajando para mejorarlo, a la vista de las observaciones criticas que los lectores hagan y de los votos que formulen en torno a la primera edición del MANUAL. Con este fin, ruegan a los lectores que envíen sus puntos de vista y sus opiniones al Instituto de Economía de la Academia de Ciencias de la U.R.S.S. (Voljonka 14,Moscú).

Los AUTORES

Moscú, agosto de 1954.

 

 

INTRODUCCIÓN

 

La Economía política figura entre las ciencias sociales[1]. Estudia las leyes de la producción social y de la distribución de los bienes materiales en las diferentes fases de desarrollo de la sociedad humana.

La base de vida de la sociedad es la producción material. Para vivir, los hombres necesitan alimentos, vestido y otros bienes materiales. Y, para poseer estos bienes, tienen que producirlos, tienen que trabajar.

Los hombres no producen los bienes materiales, es decir, no libran la lucha con la naturaleza, individualmente, sino juntos, en grupos, en sociedades. Por consiguiente, la producción es siempre y bajo cualesquiera condiciones una producción social, y el trabajo una actividad del hombre social.

En el proceso de producción de los bienes materiales concurren los siguientes factores: 1) el trabajo del hombre; 2) el objeto del trabajo, y 3) los medios de trabajo.

El trabajo es la actividad del hombre encaminada a un fin, mediante la cual transforma y adapta los objetos de la naturaleza para la satisfacción de sus necesidades. El trabajo es una necesidad natural, condición inexcusable de la existencia del hombre. Sin el trabajo, la misma vida humana seria imposible.

Es objeto del trabajo aquello sobre que recae el trabajo del hombre. Los objetos del trabajo puede ofrecerlos directamente la naturaleza, como, por ejemplo, los árboles que se talan en el bosque o los minerales que se extraen del subsuelo. Cuando son previamente sometidos a la acción del trabajo, como los minerales empleados en la industria metalúrgica o el algodón elaborado por la fábrica de hilado, reciben el nombre de primeras materias o materias primas.

Medios de trabajo son todas las cosas de que el hombre se sirve para actuar sobre los objetos del trabajo y transformarlos. Figuran entre ellos, ante todo, los instrumentos de producción, así como la tierra, los edificios en que se produce, los caminos, los canales, los almacenes, etc. Son los más importantes los instrumentos de producción, las múltiples herramientas empleadas por el hombre para trabajar, desde las toscas armas de piedra del hombre primitivo hasta las máquinas modernas. El grado de desarrollo de los instrumentos de producción indica el poder de la sociedad sobre la naturaleza, el grado de desarrollo de la producción. Las épocas económicas se distinguen unas de otras, no por lo que se produce, sino por el modo como se produce, por los instrumentos de producción empleados.

Los objetos y los medios de trabajo forman, en conjunto, los medios de producción. De por sí, aislados de la fuerza de trabajo, no son más que una suma de cosas muertas. Para que el proceso de trabajo comience, es necesario que a los medios de producción se incorpore la fuerza de trabajo.

La fuerza de trabajo es la capacidad del hombre para trabajar, el conjunto de las energías físicas y espirituales del hombre, que permiten a éste producir los bienes materiales. La fuerza de trabajo constituye el elemento activo de la producción, lo que pone los medios de producción en movimiento. Al perfeccionarse los instrumentos de producción, se perfeccionan también la capacidad de trabajo del hombre, su destreza, sus hábitos, su experiencia productiva.

Los instrumentos de producción, mediante los cuales se obtienen los bienes materiales, y los hombres, que ponen en acción estos instrumentos y llevan a cabo la producción de bienes materiales gracias a una cierta experiencia productiva y a sus hábitos para el trabajo, forman las fuerzas productivas de la sociedad. La fuerza productiva fundamental de la sociedad humana, en todas las etapas de su desarrollo, son las masas trabajadoras.

Las fuerzas productivas expresan la relación existente entre los hombres y los objetos y fuerzas de la naturaleza empleados para la producción de los bienes materiales. Sin embargo, en la producción, los hombres no actúan solamente sobre la naturaleza, sino que actúan, además, los unos sobre los otros. "No pueden producir sin asociarse de un cierto modo, para actuar en común y establecer un intercambio de actividades. Para producir, los hombres contraen determinados vínculos y relaciones, y a través de estos vínculos y relaciones sociales, y sólo a través de ellos, es como se relacionan con la naturaleza y como se efectúa la producción"[2]. Estos vínculos y relaciones determinados, que los hombres contraen en el proceso de producción de los bienes materiales, forman lasrelaciones de producción.

El carácter de las relaciones de producción depende de a quién pertenezcan en propiedad los medios de producción (la tierra, los bosques, las aguas, el subsuelo, las materias primas, los instrumentos de producción, los edificios en que se produce, los medios y vías de comunicación, etc.), de que sean propiedad de ciertos individuos, grupos sociales o clases, que emplean estos medios para explotar a los trabajadores, o de que pertenezcan a la sociedad, que se propone como fin la satisfacción de las necesidades materiales y culturales de las masas populares, de la sociedad entera. El estado de las relaciones de producción indica cómo se hallan distribuidos entre los miembros de la sociedad los medios de producción y, consiguientemente, los bienes materiales que el hombre produce. La forma de propiedad sobre los medios de producción es, por tanto, la base sobre la que las relaciones de producción descansan.

Las relaciones de producción determinan, a, su vez, las relaciones de distribución correspondientes. La distribuciónconstituye el nexo de unión entre la producción y el consumo.

Los productos obtenidos en la sociedad pueden servir para el consumo productivo o para el consumo personal. Llamamos consumo productivo al empleo de los medios de producción para crear bienes materiales. Consumo personal es la satisfacción de las necesidades del hombre en materia de alimento, vestido, vivienda, etc.

La distribución de los objetos de consumo personal producidos depende del modo como se hallen distribuidos los medios de producción. En la sociedad capitalista, los medios de producción pertenecen a los capitalistas, quienes disponen también, en virtud de ello, de los productos del trabajo. Los obreros carecen, en esta sociedad, de medios propios de producción y, para no morirse de hambre, se ven obligados a trabajar en beneficio de los capitalistas, quienes se apropian los productos de su trabajo. En la sociedad socialista, los medios de producción son propiedad social. Gracias a ello, los productos del trabajo pertenecen a los mismos trabajadores.

En las formaciones sociales en las que rige la producción mercantil, la distribución de los bienes materiales se efectúa mediante el cambio de mercancías.

Producción, distribución, cambio y consumo constituyen una unidad, en la que la producción es el factor determinante.

El conjunto de las "relaciones de producción forma la estructura económica de la sociedad, la base real sobre la que se levanta la supraestructura jurídica y política y a la que corresponden determinadas formas de conciencia social"[3]. Y, a su vez, esta supraestructura, al formarse, reacciona activamente sobre la base, acelerando o entorpeciendo su desarrollo.

La producción presenta un aspecto técnico y un aspecto social. El aspecto técnico de la producción lo estudian las ciencias naturales y técnicas: la física, la química, la metalurgia, la mecánica, la agronomía, etc. La Economía política estudia el aspecto social de la producción, las relaciones sociales de producción, o sea las relaciones económicasentre los hombres. "La Economía política —escribía V. I. Lenin— no se ocupa en modo alguno de la "producción", sino de las relaciones sociales de los hombres en la producción, del régimen social de la producción[4].

La Economía política estudia las relaciones de producción en su interdependencia con las fuerzas productivas.

Las fuerzas productivas y las relaciones de producción forman, en su conjunto, el modo de producción. Las fuerzas productivas constituyen el elemento más dinámico y revolucionario de la producción. El desarrollo de la producción arranca de los cambios operados en las fuerzas productivas, y principalmente de los cambios y el desarrollo de los instrumentos de producción, a tono con los cuales se operan luego los cambios congruentes en el campo de las relaciones de producción. A su vez, las relaciones de producción entre los hombres, al desarrollarse de acuerdo con el progreso de las fuerzas productivas, influyen activamente sobre éstas.

Para que las fuerzas productivas de la sociedad puedan progresar sin trabas, es necesario que las relaciones de producción se hallen en consonancia con el estado de las fuerzas productivas. Al llegar a una determinada fase de su desarrollo, las fuerzas productivas rebasan el marco de las relaciones de producción existentes y entran en contradicción con ellas.

Como consecuencia de esto, las viejas relaciones de producción son desplazadas, más tarde o más temprano, por otras nuevas, en consonancia con el nuevo nivel de desarrollo y con el carácter de las fuerzas productivas de la sociedad. Al cambiar la base económica de la sociedad, cambia también su supraestructura. Las premisas materiales para el cambio de las viejas relaciones de producción por otras nuevas, surgen y se desarrollan en el seno de la vieja formación social. Y las nuevas relaciones de producción despejan el camino para el progreso de las fuerzas productivas.

Es, por consiguiente, ley económica del desarrollo de la sociedad la ley de la obligada correspondencia de las relaciones de producción con el carácter de las fuerzas productivas.

Dentro de una sociedad basada en la propiedad privada y en la explotación del hombre por el hombre, los conflictos entre las fuerzas productivas y las relaciones de producción toman cuerpo en la lucha de clases. En estas condiciones, la sustitución del modo de producción viejo por otro nuevo se lleva a cabo mediante la revolución social.

La Economía política es una ciencia histórica. Versa sobre la producción material bajo su forma social históricamente determinada, sobre las leyes económicas propias de los correspondientes modos de producción. Las leyes económicas expresan la esencia de los fenómenos y procesos económicos, los nexos internos, causales, y las relaciones de dependencia que entre ellos existen. A cada modo de producción es inherente su ley económica fundamental. Y esta ley económica fundamental determina los aspectos principales, la esencia del modo de producción correspondiente.

La Economía política "investiga, ante todo, las leyes especificas de cada fase del desarrollo de la producción y del cambio, y sólo después de haber realizado esta investigación puede formular algunas leyes verdaderamente generales, aplicables a la producción y al cambio en su conjunto"[5]. Por tanto, las diferentes formaciones sociales, en su desarrollo, no se determinan solamente por sus leyes económicas especificas, sino también por las leyes económicas que rigen con carácter general para todas las formaciones, como es la ley de la obligada correspondencia de las relaciones de producción con el carácter de las fuerzas productivas. Lo que vale tanto como decir que las formaciones sociales, aun diferenciándose las unas de las otras por las leyes económicas especificas inherentes a un determinado modo de producción, se hallan unidas entre sí por algunas leyes económicas de vigencia general para todas las formaciones.

Las leyes del desarrollo económico son leyes objetivas. Reflejan los procesos del desarrollo económico, los cuales se operan independientemente de la voluntad de los hombres. Las leyes económicas surgen y rigen sobre la base de las condiciones económicas dadas. Los hombres pueden conocer estas leyes y servirse de ellas en interés de la sociedad, pero no pueden destruirlas ni crearlas.

En una sociedad de clases, la utilización de las leyes económicas tiene siempre un contenido de clase: la clase avanzada de toda nueva época se vale de las leyes económicas para impulsar el desarrollo de la sociedad, al paso que las clases caducas se oponen a ello. .....................

 

 

 

[1] El nombre de "Economía política" que se da a esta ciencia procede de dos palabras griegas: politeia y oikonomía, Politeia significa "organización social". La palabra oikonomía esta formada, a su vez, por otras dos: oikos, casa, administración doméstica, y nomos, ley. El término de "Economía política " no apareció hasta comienzos del siglo XVII.

[2] C. Marx, "Trabajo asalariado y capital". C. Marx y F. Engels, Obras escogidas, t. I, págs. 75-76, ed. española, Moscú, 1951

[3] C. Marx, Prólogo a la "Contribución a la critica de la Economía política ". C. Marx y F. Engels, Obras escogidas, t. I, págs. 332-333, ed. española, Moscú, 1951.

[4] V. I. Lenin, El desarrollo del capitalismo en Rusia, págs. 40-41, ed. española, Moscú, 1950.

[5] F. Engels, Herrn Eugen Dührings Umwälzung der Wissenschaft ("Anti-Dühring"), página 179, Moscú, 1946.

 

   Leer el documento completo en         Ver el original